Patio Chamamecero, o cómo hacer visibles a los invisibles

Apenas conformada la Secretaría de Estado de Cultura de Misiones y con Joselo Schuap recién nombrado Ministro, el flagelo de la pandemia azotó a la humanidad, dejando al descubierto las fallas estructurales y deudas del Estado con diversos sectores de la sociedad. Sin lugar a dudas, el de los trabajadores de la cultura fue uno de los primeros en ver resentida su actividad (y sigue siendo uno de los más relegados a la hora de la reactivación de sus fuentes laborales).

En medio de la disyuntiva entre gestionar cultura y brindar contención a miles de familia que se quedaron sin su sustento, la respuesta no se hizo esperar y así surgieron diversas acciones de contingencia. Como primera medida, y actuando casi en simultáneo con el establecimiento de la cuarentena, se activó el proyecto La Cultura Nos Conecta, un programa emitido de manera digital con contenido aportado por artistas que sufrieron la cancelación de fechas debido al cierre de bares y espacios musicales a inicios del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio. De esta manera y bajo el formato de música generada en casa, se brindó un paliativo económico a casi un centenar de artistas a lo largo de más de 30 programas emitidos a través de nuestras plataformas digitales.
Dentro de este proyecto se lanzó el ciclo Patio Chamamecero, que originó actuaciones pagas a 25 agrupaciones musicales de la periferia, esas que siempre estuvieron alejadas de los medios y los grandes escenarios pero que nutren cada fin de semana los encuentros campestres y fogones de la Misiones más profunda, los “invisibles” al gran público. A ellos se les brindó la posibilidad de trabajar cuando no había trabajo, ademas de una cobertura audiovisual, fotográfica y de prensa a la altura de artistas más mediáticos, reconociendo así su rol a la hora de conformar los cimientos mismo de la cultura regional